Después de haberte amado,
Se quedó en mi piel,
Un recuerdo sagrado
Y muchas cosas tuyas,
Que todavía no he olvidado.
Después de haberte amado,
Mi cuerpo quedó mal acostumbrado;
Ahora te busco por todos lados;
Y al no encontrarte me pregunto:
¿dónde encontraré unos labios tan amados?,
¿dónde un cuerpo tan delicado?.
No sé cómo olvidar,
esos labios sensuales,
que me enseñaron a besar,
cómo olvidar tus ojos,
negros, duros, tiernos
que tanto me vieron llorar.
Una mañana fue testigo,
De mi último beso;
Una noche fue testigo,
De su último adiós,
Tenía un andar sereno,
Y sonreía como un dios;
Pero eso ya no importa,
Porque nunca más volvió.
Después de haberle amado,
Muchas cosas han quedado,
Pero ahora sólo son,
Recuerdos de un pasado.
AUTORA: RAKEL RENGIFO RENGIFO ( LINDA R .R )
No hay comentarios:
Publicar un comentario